Una presa no sirve para nada, a no ser que pueda afrontar el futuro. Esta frase de José Torán remueve emociones. Sobre todo, cuando el embalse que conforma la presa se está desangrando por el desagüe de fondo. Y no hay remedio para detener esta sangría. Solo la lluvia podría volver a insuflarle vida. Pero que esto suceda, no depende ni de políticos, ni de técnicos, ni de académicos. Entonces, ¿para qué demonios sirve una presa?

«La obra pública ha de corresponder ecológicamente no sólo a la solicitación de la colectividad interesada que la reclama, sino que debe justificarse ante la totalidad el pueblo que la sufraga; y ha de ser, por lo tanto, respuesta concreta a las legítimas aspiraciones de todos». Torán puso el dedo en la llaga con esta afirmación. Y con ella casi se responde la pregunta que da título a este artículo.

Porque la presa como el resto de las obras hidráulicas sirve para dar respuestas a las aspiraciones de la ciudadanía contribuyente a sufragar sus elevados costes de construcción y mantenimiento. Por esta razón, deben estar preparadas para afrontar el futuro. Mediante su constante y eficaz mantenimiento. Su resiliencia y su capacidad de volver a ejercer su función cuando las circunstancias lo permitan.

Esa es la mejor justificación de su existencia. Aunque a todos no le guste y a muchos disguste su presencia. Ni su interrupción del natural discurrir del agua por el cauce.
¿Que para qué demonios sirve una presa? Servirá para algo siempre que los beneficios de su construcción puedan repartirse entre esa colectividad que está llamada a disfrutarlos.

Y que pueda afrontar el futuro con garantías de ejercer su función laminadora, reguladora y repartidora equitativa del bien que atesora. Con la máximas garantías de idoneidad estructural y de adecuada gestión.

Para todo eso sirve. Por muy vacío que se encuentre el embalse, la presa sigue ahí. Esperando la lluvia para volver a revivir esperanzas de bienestar y reparto equitativo de lo que es de todos.

Y así hemos contestado a la pregunta de para qué demonios sirve una presa

Lorenzo Correa

¿Te interesa la gestión seductora del agua mediante la generación de confianza en el usuario?

Contacta con nosotros para más información sobre la participación de Lorenzo Correa en charlas, conferencias, formaciones o debates en ámbito nacional o internacional.